
Como viene siendo ya un clásico la semana que entra podremos disfrutar de la XIV edición del Festival Aéreo que se celebra anualmente en la Playa de Poniente-Motril-Granada.
El Domingo 30 de Junio desde las 11:00 h. habrá espectáculo para todos. Los niños soñarán con ser pilotos y los mayores volveremos a ser niños.
Todos los años nos sorprenden presentándonos espectaculares aparatos aeronáuticos tanto de salvamento como de protección (suena muy feo decir de guerra).
Para disfrutar de sus pasadas a baja altura, sus acrobacias y hacer unas cuantas fotos de las que sería difícil hacer en otras condiciones tendremos que llevar un equipo indispensable y no me refiero a la cámara de fotos, que por supuesto esa no se nos olvidaría. Me refiero a algo tan simple como una buena gorra o sombrero que nos tape bien del sol y una botella de agua, porque vamos a pasar horas al sol y no es cosa de tomar a broma.

Una sombra se agradece. Estos bulldog fueron rápidos.
En cuanto a tomar fotos lo pasarémos pipa porque se nos acercarán tanto esas máquinas que nos dejarán capturar todo lujo de detalles. Qué fácil parece su manejo cuando el que está a los mandos de esos aparatos es un profesional.
Respecto a los parámetros de disparo de nuestra cámara tendremos varias opciones. Podremos mantener abierto a tope nuestro objetivo sabiendo que la distancia nos mantendrá toda la imagen que nos atrae en hiperfocal y a la vez haremos que sea mucho más rápida la toma, o por el contrario podremos cerrar un poquito nuestro diafragma y así cojer un poquito más de detalle con un mayor contraste buscando el punto dulce de nuestros objetivos y a la vez bajar ligeramente la velocidad de disparo que puede ser interesante si lo que fotografiamos es un helicóptero u otro aparato con hélices. Estas se verán con un poco de movimiento y acrecentará el ritmo de la foto. Si la foto es excesivamente rápida quedaría raro ver una hélice totalmente detenida, inmóvil. Para gustos colores. El sol nos permitirá hacer lo que nos plazca en ese aspecto. Por desgracia coincidirá que probablemente en una orientación, si miramos concretamente al este nos producirá un contraluz importante así que salvo algún detalle creativo mejor haremos las fotos hacia el sur o hacia el oeste. Nos iluminará mejor el motivo.
Tampoco estaría de más dar leves descansos a la cámara porque si la mantenemos encendida durante todo el espectáculo y encima disparamos ráfagas podríamos estar dándole un buen calentón. Tenemos que cuidar de nuestro equipo.
Como probablemente usaremos en casi todo el espectáculo aéreo nuestro «tele» también tendremos que darnos a nosotros el mismo descanso que a la cámara. Podemos terminar con el brazo bastante agotado.
Sólo queda desear que el que vaya lo pase en grande. Dejo unas fotos de ejemplo de una de las anteriores ediciones a la que pude asistir: